viernes, 21 de octubre de 2011

CANAPERO


    




         Un canapé es una tapa. Afirmo. Lo que diferencia a una del otro es el contexto, la compañía, los alrededores, el vecindario. Me explicaré con brevedad. Una tapa es UNA tapa. ¡Póngame una tapa! bar, camarero, rebozado ( no siempre, pero siempre formando parte del contexto), plato pequeño (plato de tapa, plato que tapa), un comensal definido "ésta tapa para ésta persona" ineludiblemente..... España. Un canapé es una pieza más. Un canapé implica cien canapés más en sus lindes. Un canapé implica bandeja de camarero paseante que sortea comecanapés. Un canapé implica mil hipotéticos devoradores; no es para ti o para mí, es para alguien en la sala, alguien impreciso. El victimario de la tapa es el de un western; pocas víctimas (tapas) e identificados responsables. El del canapé es Hiroshima, miles de víctimas y un azaroso responsable, un soldado más entre la miríada de posibles ejecutores. El canapé implica celebración, evento, un porqué y el canapero es un infiltrado, que finje interés con el mero interés de tragar y al mismo tiempo es el único que no finje entre gente que finje interés por el evento. La tapa responde al milenario ritual del bar, ora en soledad ora en compañía y no deja espacio para la hipocresía. La tapa es una objetiva y nunca fingida respuesta al hambre y a la gula. La tapa es honesta. El canapé oculta.

            El canapero, sabedor del desprecio íntimo que a un español inspira una mera acumulación de tapitas de baja calidad, es decir canapés, se aprovecha y glute y deglute sin descanso. La tapa es un festín de gozo, el canapé responde al hambre y al instinto de posguerra. La tapa la paga alguien y el canapé ya está pagado por el que celebra el evento, es decir, es una inversión. 

          El canapero sabe que no paga. El canapé se come gratis. ¿Alguien conoce a alguien que haya pagado por un canapé? El canapé es el antecesor de la subvención artística al arte. 

            Me permito todo este circunloquio gastromáquico porque cuando se habla de canaperos "personas que asisten a eventos de todo tipo con el fin de ingerir aperitivos de manera masiva y a sabiendas de que no deberán pagar por ellos" se incide en la vis cómica del personaje en sí, el gorrón, el bufonesco deglutidor y no se explica nunca esta comparativa canapé-tapa que para mi es esencial. De hecho me he contenido para no seguir diletando con ella. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario